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21 dic 2012

La CTC: el carlismo hoy

La historia del carlismo es ya una historia muy larga. Desde 1833 hasta 2011 han pasado 178 años. Ocupa parte del siglo XIX, todo el siglo XX y -de momento- parte del siglo XXI. Es tan larga que cada vez se nos hace más difícil conocerla entera y con todos los detalles. Pero como sucede en la historia de cualquier familia lo más importante es conocer la historia reciente.

Después de su participación en el Alzamiento-Cruzada de 1936-1939 la Comunión Tradicionalista Carlista fue ilegalizada por el gobierno del general Francisco Franco. Con los carlistas se cometió una gran injusticia porque aunque habían ayudado con los requetés a ganar la guerra, el gobierno cerró los círculos carlistas, prohibió las organizaciones de pelayos y margaritas, confiscó los periódicos tradicionalistas, etc.

Es verdad que el franquismo trajo cosas buenas, fue un periodo de paz y de orden, la Iglesia volvió a tener en sus manos la educación... pero al prolongar una dictadura tanto tiempo, casi durante 40 años, se acostumbró a la gente a vivir dependiendo del estado en vez de reconstruir una sociedad viva y tradicional.

En aquellos años tan difíciles, el jefe de todos los carlistas era el Regente Don Javier de Borbón-Parma, él y los dirigentes del carlismo trabajaban por mantener viva a la Comunión y aunque faltaban medios y libertad los carlistas se seguían reuniendo en muchos actos. El más importante era el de Montejurra, en Navarra.

Cuando Franco nombró sucesor suyo a don Juan Carlos de Borbón, descendiente de la dinastía liberal, quedó ya muy claro que el carlismo tenía que organizarse por su cuenta, como siempre lo había hecho. El problema es que en aquella época, los años 60 y 70, la sociedad española sufrió unos cambios enormes. El mundo rural fue despoblándose y las ciudades crecieron; la Iglesia entró en unos años de crisis y confusión; las ideologías de moda -liberalismo, socialismo, nacionalismo...- contaminaron entonces a muchos católicos y a muchos carlistas. El resultado es que el carlismo pasó unos años de divisiones y problemas internos graves que lo apartaron de la lucha política y electoral en unos momentos en que hubiera sido muy necesario. El hijo de don Javier, don Carlos Hugo de Borbón-Parma, convenció a muchos carlistas para que cambiaran el Ideario de siempre (Dios, Patria, Fueros, Rey) por un lema nuevo: "Socialismo, Federalismo, Autogestión". Además cambió el nombre de la Comunión por el de Partido Carlista.

En mayo de 1986 varios grupos de carlistas que no estaban de acuerdo con todos esos cambios (Unión Carlista, Comunión Tradicionalista, Comunión Católico-Monárquica...) organizaron en El Escorial el Congreso de la Unidad y reconstituyeron entonces la actual Comunión Tradicionalista Carlista. En la CTC mantenemos el ideario de siempre, el de Dios, Patria, Fueros, Rey, y trabajamos por aplicarlo a la política española, aunque por desgracia no sabemos o no está del todo claro quién es realmente el Rey de España. La CTC está dirigida por la Junta de Gobierno y tiene juntas y delegaciones regionales repartidas por toda España. Desde 1986 los presidentes de la Comunión han sido: Miguel Garisoain, Domingo Fal-Conde, Carlos Ibáñez y María Cuervo-Arango, la actual presidenta.

En estos últimos 25 años, la Comunión Tradicionalista Carlista (CTC) ha mantenido y reconstruido la organización carlista, ha puesto en marcha distintas iniciativas para llevar el mensaje del carlismo a la sociedad y se ha convertido en un punto de referencia para todos los españoles que quieran saber qué dice hoy en día la Tradición política española.

(NOTA: este texto fue redactado en 2011 dirigido a los chavales de Cruz de Borgoña)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por la explicación Sr.Garisoain.
Soy simplemente un joven padre de familia preocupado por la sociedad en la que mis hijas están creciendo: sin dejar espacio a un Dios que nos ofrezca guía, sin una tierra a la que poder llamar Patria y sin derechos por ser personas, ya que los poderes se meten en los aspectos más íntimos de nuestra libertad.
Reciba un fuerte abrazo y le deseo lo mejor en estas cristianas Fiestas y en el año venidero.
David Delgado